La TIZADA es la disposición de los moldes sobre la mesa de corte. Es un papel que va sobre la encimada (capas de tejido para cortar) en donde está representada la curva que elegimos (2/2/1). Primero se trabaja de manera digital y luego se imprime en un plotter.

El objetivo de la tizada es el aprovechamiento del tejido, por lo tanto su optimización debe ser mayor al 80%. Esto quiere decir que los moldes deben estar pegados uno al lado del otro, como rompecabezas, para que el desperdicio de tela sea el mínimo posible.

Lo que tenemos que tener en cuenta para armar una Tizada:

• ANCHO: Este va a estar determinado por el rollo más angosto. También hay que descontarle los orillos y con eso tenemos el «ancho aprovechable».

• LARGO: El largo de la tizada tiene que ver con la curva que estemos manejando y la prenda en sí. Es fundamental tener presente el largo de la mesa, la tizada debe ser menor a la misma. 
• CURVA DE TALLES*: Cuáles son los talles a cortar y la cantidad de cada uno. No es lo mismo hacer una curva 2-2-1 que una 4-3-1. En el primer ejemplo necesitamos repetir los moldes 5 veces mientras que en el segundo, unas 8. En este caso, el largo de la tizada va a ser mayor.

• RINDE: Para saber el rinde de la tizada en tejidos planos, se divide el largo de la misma por la cantidad de prendas marcadas. Y para tejidos de punto, se pesa la primera capa y se divide por el número de prendas.

Contanos cómo fue tu experiencia con la tizada!

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